Programas en Colorado están trabajando para ampliar sus esfuerzos en medio de COVID-19, falta de personal en las prisiones y atrasos con la tecnología.
La ciudad en el sur de Colorado alberga a algunas de las entidades más contaminantes en Colorado, pero poco se sabe sobre sus impactos en el aire. Eso está por cambiar.
Preocupadas por el aumento en el desarrollo petrolero y gasífero, algunas municipalidades han empezado a recolectar sus propios datos para determinar las posibles consecuencias.
Iniciativas de capacitación están trabajando para proporcionar a agricultores nuevos y las herramientas que necesitan para mantener sobre la mesa alimentos cultivados localmente.
El cambio climático está empeorando las desigualdades históricas en la infraestructura de calefacción, ventilación y aire acondicionado en las escuelas públicas del estado.