El centro urbano más grande de Colorado padece de la misma segregación de alumnos de color en escuelas con altos índices de pobreza que otras ciudades del país, según un nuevo estudio de datos federales.
El informe, publicado por The Atlantic, se basa en los datos recopilados por una herramienta poderosa llamada el Atlas de la Equidad Nacional de la agencia sin fines de lucro PolicyLink y el programa de Equidad Ambiental y Regional de la Universidad del Sur de California.
El estudio de The Atlantic examina desde una nueva perspectiva las condiciones criticadas hace tiempo por los defensores de la integración escolar. Un número desproporcionado de niños de color están en escuelas racialmente aisladas, y la mayoría están en escuelas con altos índices de pobreza.
Varios estudios demuestran que la integración socioeconómica en las escuelas ayuda académicamente a los estudiantes de bajos ingresos sin retrasar a sus compañeros más pudientes. Pero a medida que el transporte público escolar pierde favor con la corte federal, las escuelas públicas del país han regresado a la antigua configuración de segregación racial y socioeconómica. En algunos casos, la segregación actual es peor que antes que la corte instituyera el programa de autobuses escolares.
Esto es lo que pasó en Denver. Aunque las Escuelas Públicas de Denver (DPS, por sus siglas en inglés) hicieron de la integración y la equidad puntos centrales de su último plan estratégico, las escuelas de DPS están más segregadas que a principios de los años 1970, cuando la Corte Suprema de EE.UU. ratificó un programa obligatorio de autobuses escolares con el fin de integrar las escuelas.
Según el Atlas de Equidad, de los 100 distritos escolares urbanos con más segregación socioeconómica en todo el país, DPS ocupa el puesto número 26.
El Atlas de la Equidad indica que en Denver el 72 por ciento de los estudiantes minoritarios asisten a escuelas con altos índices de pobreza, es decir, escuelas donde más del 75 por ciento de los estudiantes viven en la pobreza (con base en si reúnen requisitos para recibir almuerzos escolares subsidiados). Solo el 20 por ciento de los estudiantes blancos asisten a escuelas con altos índices de pobreza. (Para ver esta información, haz clic en el enlace anterior, encuentra la ciudad de Denver y selecciona la opción que dice “over time”. Vale la pena explorar el sitio, que ofrece toda una gama de datos interesantes.)
El grupo más afectado es el de los alumnos latinos. Más del 79 por ciento de los niños latinos asisten a escuelas con altos índices de pobreza, y solo el 2 por ciento asisten a escuelas donde menos del 25 por ciento de estudiantes viven en la pobreza.
En un estudio realizado el año pasado por el programa Rocky Mountain PBS como parte de su serie documental Parados en la Brecha, yo indiqué que más del 80 por ciento de los alumnos latinos asistían a escuelas cuyos alumnos eran principalmente latinos.
Los alumnos afroamericanos están menos segregados de lo que estaban antes que se implementara el programa de autobuses escolares, pero representan solo el 14 por ciento del alumnado, mientras que los latinos representan el 57 por ciento del alumnado en DPS.
Los funcionarios de DPS están conscientes de estos problemas y están tomando algunas medidas para abordarlos. Pero tienen sus manos algo atadas por la Ley de Elección de Escuelas Públicas, una ley estatal de 1990 que permite a los alumnos asistir a cualquier escuela en el distrito donde viven u otro distrito si hay cupo.
Algunos distritos en otros estados han implementado programas de “elección controlada”. En estos programas (que varían entre los distritos), los alumnos hacen una lista de sus escuelas preferidas. Para asignar las escuelas, los distritos toman en cuenta varios factores, con la diversidad socioeconómica siendo uno de los más importantes.
Pero debido a la ley de 1990, no se permite la elección controlada en los distritos escolares de Colorado.
Sin embargo, en DPS, el superintendente Tom Boasberg (quien actualmente está tomando 6 meses de licencia) estableció una serie de zonas de inscripción, en parte para fomentar la diversidad en las escuelas de Denver. Bajo las zonas de inscripción, a las familias las asignan a una de varias escuelas ubicadas dentro de límites más amplios que aquellos alrededor de las escuelas locales tradicionales. Las familias pueden solicitar su escuela preferida, pero no tienen un espacio garantizado en esa escuela. Sin embargo, reciben un espacio en una de las escuelas entro de su zona.
El grupo racial y el estatus socioeconómico de la familia no se toman en cuenta en la decisión, los funcionarios del distrito dijeron. Sin embargo, ampliar las zonas ayudará a diversificar el alumnado de las escuelas, y DPS seguirá usando esta estrategia, me contó recientemente Anne Rowe, presidenta del comité escolar de Denver.
“Los datos indican que la segregación en las Escuelas Públicas de Denver no ha cambiado significativamente en los últimos 10 años y depende en alto grado de la composición demográfica del barrio”, Rowe dijo. (Datos del Departamento de Educación de Colorado confirman que la segregación casi no ha cambiado en la última década.) “A lo largo de los últimos años, hemos trabajado duro para crear más escuelas integradas al implementar zonas de inscripción, [ofrecer] mayor acceso al transporte público y mejorar las escuelas de todos los vecindarios”.
Algunos padres se quejan de que las zonas de inscripción los privan de su escuela local, pero hasta ahora el distrito se ha mantenido firme y hasta ha expandido el número de zonas. Además, el programa también tiene muchos defensores, entre ellos muchos alumnos, según Boasberg.
“Nuestros alumnos nos dicen que quieren estar en escuelas que reflejan la diversidad de su comunidad”, me contó Boasberg en una entrevista para Chalkbeat Colorado en 2014.
Luego, con una sonrisa irónica, añadió: “La mayor parte de los padres también apoyan el programa, algunos con más entusiasmo que otros”.
El estudio de The Atlantic señala a Colorado Springs por ser una de las ciudades del país con menos estudiantes de color en escuelas con alto índice de pobreza. Sin embargo, este hallazgo es algo dudoso, ya que el Atlas de la Equidad combina datos de los varios distritos escolares que están ubicados, al menos en parte, dentro de los límites de la ciudad.
Es posible que los cálculos del Atlas de la Equidad correspondan al Distrito 11, el distrito escolar más grande en la región de Pikes Peak. El Distrito 11 abarca el área central de Colorado Springs. Debido en parte a la gran cantidad de empleados militares que viven en Colorado Springs, tiene menos segregación residencial que Denver.
“No hay un área latina, o un área afroamericana en el pueblo”, dijo Janeen Demi-Smith, directora ejecutiva de datos sobre la educación y los servicios de apoyo del distrito. “Hay minorías esparcidas por toda nuestra comunidad, a diferencia de muchas otras ciudades.”