Una falta de vivienda asequible en Colorado ha desempeñado un papel en que a niños los hayan sacado de sus hogares y colocado en el sistema de custodia temporal en los últimos años, según un análisis del Departamento de Servicios Humanos de Colorado y entrevistas con expertos.
La vivienda inadecuada o enfrentar la falta de vivienda fue un factor en el 13 por ciento de los casos en los que a niños en Colorado los colocaron en custodia temporal entre 2021 y 2023, los datos muestran. A nivel nacional, la vivienda se menciona como una razón para sacar a los niños de sus familias en alrededor del 11 por ciento de los casos, según los datos más recientes recopilados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU.
Los representantes del departamento estatal de servicios humanos dijeron que con frecuencia hay otras razones por las que las agencias de bienestar infantil se involucran y que debe existir un riesgo en la seguridad del niño para que los representantes den pasos para sacar al niño de su hogar. Sacar a los niños de sus familias es poco común, agregó Joe Homlar, quien dirige la división de bienestar infantil del estado, y la tasa de niños a quienes colocan en custodia temporal ha disminuido en años recientes conforme las agencias han buscado mantener a más familias juntas.
“Solo en casos muy raros a los niños los sacan de un hogar únicamente debido a la situación de vivienda del padre”, dijo Julie Popp, la gerenta de comunicaciones del Departamento de Servicios Humanos de Colorado.
En Colorado, el uso de sustancias de un padre se mencionó en el 45 por ciento de los casos en que a los niños los sacaron en los últimos tres años, y la negligencia fue un factor en el 38 por ciento de los casos, según Popp.
Sin embargo, quienes abogan a favor de las familias dijeron que sin una vivienda estable, los padres con frecuencia enfrentan desafíos para reunificarse con sus hijos. A la vez, perder a sus hijos al sistema de custodia temporal puede causar que las familias caigan en un remolino financiero y emocional, haciendo que sea más difícil encontrar vivienda y mantenerla.
“La vivienda estable es una base para que las familias puedan abordar todos los otros desafíos que tienen en sus vidas”, dijo Shawna Mackey Geiger, directora de participación para la Oficina del Abogado de Padres Respondedores en Colorado.
La oficina de Geiger proporciona representación financiada por el estado en casos de bienestar infantil a padres que no pueden pagar por abogados—lo cual, en Colorado, es la mayoría de ellos. En el estado, como en otros lugares, estar involucrado con los servicios de bienestar infantil se relaciona estrechamente con la pobreza; el 90 por ciento de los casos de bienestar infantil en Colorado incluyen a por lo menos un padre que está viviendo en la pobreza, según un informe publicado en 2023 por la Oficina del Abogado de Padres Respondedores.
“Para nuestros clientes que tienen desafíos con trastornos de uso de sustancias, tienen aún más dificultades cuando no tienen un lugar permanente donde quedarse”, Geiger dijo. “Para nuestros clientes que tienen desafíos con problemas de salud mental, es lo mismo”.
Geiger agregó que “es mucho más fácil que las familias prosperen cuando tienen vivienda estable, y es más fácil que los niños prosperen cuando sus padres no están teniendo dificultades para encontrar un lugar estable donde quedarse”.
Aunque la trayectoria de cada familia hacia la inestabilidad en la vivienda y la falta de hogar es singular, el denominador común es una falta de vivienda asequible, según Evan Caster, quien dirige las iniciativas por falta de hogar en el Departamento de Servicios Humanos de Colorado.
“Los obstáculos en el acceso a la vivienda han cambiado”, Caster dijo. Para todas las personas en Colorado, incluyendo aquellas con niños, “la vivienda en alquiler a bajo costo ha sido más difícil de encontrar”.
Homlar dijo que las agencias de servicios humanos en los condados trabajan duro para mantener unidas a las familias o reunirlas nuevamente. Sin embargo, agregó, la vivienda con frecuencia no es la preocupación más prominente de las agencias de bienestar infantil cuando abordar barreras para reunir nuevamente a las familias.
“Debido a que a los niños no los sacan únicamente por [cuestiones de] vivienda, solo estar sin hogar no sería un obstáculo” para la reunificación, Homlar dijo.
Algunos defensores de la seguridad infantil dicen que ayudar a los padres con sus necesidades de vivienda terminaría por ayudar a sus hijos. Ruth White, quien dirige el Centro para la Vivienda y el Bienestar Infantil en Maryland, dijo que muchas agencias de servicios humanos tienen recursos para ayudar directamente a las familias.
“Podrían estar pagando por el alquiler, pagando por moteles, arreglando automóviles, distribuyendo dinero”, White dijo. “Si hablas con exparticipantes de cuidados temporales cuando adultos, te dirán con frecuencia: ‘Sé que si solo hubieran pagado el alquiler de mi mamá, esto no me hubiera pasado a mí’”.
Pero las agencias raramente hacen eso, y en lugar dejan que las familias encuentren una forma para salir de la falta de vivienda, según White, y con frecuencia con la carga adicional de tomar clases de crianza u otros requisitos que la corte manda. Este método, dijo, ignora el trauma impuesto en los niños cuando los separan de sus padres.
Sonia Neblett es una defensora de padres en la Oficina del Abogado de Padres Respondedores en Colorado. Desde su perspectiva, la vivienda es quizás el mayor obstáculo para reunificar a muchas de las familias que ayuda.
En el trabajo de Neblett a favor de las familias, usa su experiencia en el sistema de bienestar infantil. En 2007, después de que a su esposo lo encarcelaran y la familia perdiera una fuente crucial de ingresos, a sus hijos los sacaron de su hogar y los colocaron en custodia temporal con la madre de Neblett, donde se quedaron por años. Culpa al sistema de bienestar infantil por destruir a su familia.
“Sé lo que significa estar sin vivienda con tus hijos y que haya personas aquí que piensan que eres la peor persona en el mundo”, Neblett dijo. Perder a sus hijos la destrozó, agregó. “Terminé como en un remolino en modo ‘no me importa’ después de eso”. Se convirtió en adicta a la oxicodona.
Neblett tuvo un momento de suerte en la cárcel. Un proveedor de salud mental “creyó en mí más de lo que yo creía en mí misma” y la puso en camino hacia la libertad condicional y la vivienda. En 2009, solicitó que le regresaran a sus hijos y ganó. Desde entonces, Neblett dijo, se ha dedicado a reconstruir a su propia familia—y a otras familias.
Encontrar vivienda es su especialidad.
En 2022, el trabajo de Neblett la conectó con Ray Rosa y su esposa, Susana Dorado. La pareja estaba sin vivienda en Denver, acampando en las calles o en una bodega. Les habían sacado a sus cinco hijos, desde un bebé de 1 año hasta uno de 14, uno por uno, después de acusaciones de negligencia y abuso que la pareja dijo eran falsas.
En el caso final—el que resultó en que a su hija mayor y a la menor las colocaran en custodia temporal con desconocidos—los funcionarios del sistema de bienestar infantil señalaron a la familia debido a las malas condiciones en la casa de un pariente donde se habían estado quedando.
Cuando Neblett los conoció, Dorado, quien sufre de convulsiones, había perdido su cobertura de Medicaid. Sus medicamentos ya no se cubrían. Rosa estaba haciendo todo lo posible por cuidarla. Solo para sobrevivir de un día a otro era necesario usar todo lo que tenían.
La lista de requisitos que los funcionarios habían establecido para reunificar a la familia—clases de crianza, clases de habilidades prácticas, terapia, pruebas al azar por drogas y visitas con sus hijos—parecían imposibles de cumplir. Olvídate de mantener un trabajo.
Un día, Rosa llamó a Neblett llorando.
“Me dijo: ‘Soy todo un fracaso. Ni me siento como un hombre. No puedo ni mantener a mi familia. Siempre mantengo a mi familia’”, Neblett recordó.
Rosa recuerda eso también: “Hubo un momento ahí en el que le dijimos a Sonia: ‘Deja que se queden con nuestros hijos. Nos tenemos el uno al otro’”.
Esta vez, fue el turno de Neblette de creer en la pareja más de lo que ellos creían en sí mismos. “Sonia no nos permitió hacer eso”, Rosa dijo.
Neblett describe su técnica para encontrar vivienda en el ajustado mercado de bienes raíces de Denver como una cuestión de presentarse en oficinas de vivienda y complejos de apartamentos, rehusarse a aceptar un no como respuesta, y llegar a lo que llama un “sí lento”. En un solo fin de semana que se ha convertido en un caso mítico en la oficina, encontró vivienda para 11 familias. Geiger, la colega de Neblett, la describe como una trabajadora milagrosa.
“Ella tiene maneras que yo no sé cómo aprovechar o cómo empezar a buscar”, Geiger dijo. “Pareciera como que ella hace aparecer cosas de la nada”.
Lo que Neblett hizo aparecer para Rosa y Dorado fue un apartamento de dos recámaras en el centro de Denver con una pequeña área de juegos enfrente donde su hija menor podía jugar.
“Cambió la trayectoria de su caso de una gran manera”, dijo Avery Lehr, la abogada de Rosa en el caso de bienestar infantil.
En una entrevista en su pórtico soleado en la primavera de este año, Rosa y Dorado usaron una forma diferente de expresar lo que Neblett hizo por ellos.
“Sonia es maravillosa”, Rosa dijo. “Le decimos el ángel de Dios que él nos envió a nosotros”.
La pareja estuvo de acuerdo con que mudarse a una vivienda estable fue transformador y les permitió enfocarse solamente en que les regresaran a sus hijos.
En el verano, Rosa fue uno de tres padres a quienes la Oficina del Abogado de Padres Respondedores celebró en Elitch Gardens, el parque de diversiones en Denver, por dar pasos heroicos para reunificarse con sus hijos. Sentada junto a la pareja estaba su hija más pequeña, ahora de 2 años, quien felizmente abrazó a su mamá y papá durante la ceremonia. Su hija mayor, de 16 años, también estuvo presente, sentada cerca de su mamá. Ambas niñas ahora están de regreso en el hogar, y sus padres están enfocados en ganar la custodia de sus otros tres hijos, quienes siguen en custodia temporal.
Para Sarah, la hija mayor, ha sido un camino difícil. No se ha olvidado de los meses durante los cuales no vio a sus padres ni a sus hermanos.
“Pensé que yo no les importaba”, dijo. “Pero eso no es lo que estaba pasando”.
Ese día, dijo, solo estaba feliz de estar de nuevo con sus padres y su hermana menor, quien la adora. Por el momento, Sarah Rosa quería lo que cualquier niño hubiera querido un día caluroso: ir al parque acuático.
Algunos de los hijos y nietos de Neblett también estaban en Elitch Gardens ese día, disfrutando del parque de diversiones. Pero Neblett no estaba lista para relajarse; había más familias sin vivienda—siempre las hay—y estaba trabajando para conseguirles un hogar.
Nota del editor (29 de oct., 2024): En el primer párrafo de esta historia, datos del Departamento de Servicios Humanos de Colorado (CDHS, por sus siglas en inglés) se citaron originalmente en relación con una falta de vivienda asequible. Esos datos del CDHS mencionan la falta de vivienda y la vivienda inadecuada como factores en que a niños los saquen de sus hogares, pero no la asequibilidad de la vivienda.
Traducido por Alejandra X. Castañeda