Hace seis años, el doctor Jeffrey Brenner fue catapultado a la fama a nivel nacional cuando un artículo en el diario New Yorker describió sus esfuerzos en el proceso de “hot spotting”, es decir, la utilización de datos para identificar personas que usan mucho los sistemas de salud en Camden, Nueva Jersey.
Brenner, un médico general, empleó esta información para proporcionar servicios médicos y sociales integrales a estos pacientes a través de la Coalición de Proveedores Médicos de Camden, la cual fundó. Su modelo se ha replicado en otras partes del país, incluyendo en Aurora, Colorado. Ahora Brenner está llevando su modelo a todo Estados Unidos.
El 31 de enero de 2017, Brenner anunció que UnitedHealthcare, una de las compañías de seguridad médica más grandes en la nación, invertirá $15 millones en la Coalición de Camden en los próximos tres años para apoyar algunos de sus proyectos piloto, incluyendo su primer programa Housing First. Brenner dejará la Coalición que fundó para convertirse en el presidente de servicios humanos y de salud integrados con UnitedHealthcare y dirigir su programa myConnections, el cual tiene como objetivo ayudar a conectar a los pacientes de bajos recursos con servicios sociales y gubernamentales.
Con este cambio, Brenner ha dicho que espera asegurar que millones de personas en todo el país tengan acceso al modelo que desarrolló en Camden. Cuando se estaba preparando para dejar la Coalición, Brenner reflexionó sobre lo que ha aprendido acerca de cómo ofrecer servicios a las poblaciones vulnerables. Estas son las partes más destacadas de nuestra conversación.
¿Qué es lo más importante que aprendió haciendo este trabajo?
Lo más importante que hemos aprendido es todo lo que nos queda por aprender. Para que realmente podamos coordinar esto y crear un campo confiable, necesitamos estudios de alta calidad y multidisciplinarios y un marco bio-psico-social claro, y no lo tenemos ahora. No se avanzó en la lucha contra el cáncer hasta que hicimos el proyecto genoma humano y luego aprendimos el alfabeto. Creo que estamos en 1972 en lo relacionado con la manera en que las personas utilizan el sistema de cuidados de salud.
¿Por dónde empezamos?
Entendiendo que la pobreza es el factor central de este trabajo. Ahora entendemos la biología y la psicología de la desigualdad de ingresos y de la pobreza y cómo afectan a las personas. Crean un sentimiento de impotencia y estrés tóxico. Ser pobre en Camden es como el sentimiento que te da cuando te pasa lo peor que te puede pasar en la vida y no duermes, te mueves y mueves en la cama, y ahí te quedas atrapado.
Ha escrito sobre el papel que desempeña el trauma en las vidas de sus pacientes. ¿Cuál es la relación entre la pobreza y el trauma?
Crecer en la pobreza aumenta la probabilidad de que estés expuesta al tipo de eventos traumáticos que resultan en estrés tóxico. Tu familia, tus vecinos y tu comunidad entera están estresados, así que vas a tener menos resiliencia. Yo creo que los cuidados que toman en cuenta el trauma quizás sean la tecnología más poderosa que hayamos inventado en los últimos 100 años.
¿Qué papel desempeñan los doctores en el tratamiento del estrés tóxico y su impacto?
Debemos reconocer que la medicina, como la practicamos actualmente, es una herramienta muy débil para resolver un problema muy grande y complicado. [En la actualidad], tomamos a las personas que están estresadas, ansiosas y abrumadas y les hacemos pruebas, les damos medicamentos y recreamos el trauma. Debemos practicar una tarea en equipo y reconocer la importancia de los datos en el diseño y la promoción de estas colaboraciones.
Además de la pobreza, ¿de qué manera afectan otros determinantes sociales la salud de sus pacientes?
La palabra “determinantes” es la palabra incorrecta. Estos factores son “correlaciones” sociales. Los determinantes significan factores que están absolutamente conectados y que son irrefutables. Pero sabemos que no todas las personas sin hogar están enfermas y que no a todas las personas enfermas les falta un hogar. Los determinantes sociales insinúan que no hay esperanza. Considerar a los factores como la pobreza y el trauma como correlaciones sociales significa que puedo reducir los factores de riesgo y aumentar los factores protectores.
Deme un ejemplo de cómo los proveedores de servicios de salud pueden tratar las correlaciones sociales.
Pensemos sobre la falta de vivienda, no como una falla personal al azar, pero como una enfermedad con un origen y que resulta en una serie de comportamientos predecibles. Sabemos que la gran mayoría de los pacientes que sufren crónicamente de la falta de vivienda pasaron por traumas severos al principio de su vida. Esto causa que tengan dificultades para establecer relaciones. Utilizan sustancias para lidiar con la vida y pueden tener una enfermedad mental.
Por lo tanto, es lógico que estar en un refugio con 70 personas más sea una experiencia aterrorizante para ellos. Entonces el comportamiento de dormir en las calles deja de ser un misterio y se convierte en algo con factores causales que podemos tratar y potencialmente curar. La vivienda permanente con apoyos, como la de los modelos de Housing First, se convierte en un tratamiento apropiado.
¿De qué manera afecta su trabajo este entendimiento?
El trabajo más importante que he llevado a cabo en toda mi carrera, y que hemos hecho como organización, ha sido en el último año. Obtuvimos 50 vales de vivienda de la Sección 8 del estado de Nueva Jersey y luego recaudamos fondos para los servicios. Hemos estado acomodando a personas con complejidades médicas extremas, incluyendo problemas de salud mental y adicción y obstáculos sociales, en apartamentos nuevos con servicios de apoyo a su alrededor.
Los estudios aleatorios controlados sobre la vivienda permanente con apoyos nos dieron ciertas indicaciones de que nuestros resultados podrían ser buenos. Pero estamos observando los resultados más fenomenales que he visto en mi trabajo. Un análisis preliminar muestra una reducción del 39 por ciento en visitas al hospital, según una evaluación de visitas a la sala de emergencia y estadías por día, en comparación con los dos años antes de suscribirse al programa. Estamos en medio de una evaluación a más largo plazo con métodos combinados y pensamos que también observaremos una reducción en los costos.
¿Qué le sorprende más de este trabajo?
Lo difícil que es realmente. Tiene que ver con la fuerza laboral y la manera como capacitamos a los/las doctores/as, enfermeros/as y trabajadores/as sociales. Tiene que ver con el pago. Tiene que ver con la manera como utilizamos los datos. Tiene que ver con la manera como estructuramos los modelos clínicos, y todo es obsoleto. No tiene que ver con destruir silos; tiene que ver con pensar de otra forma sobre las cosas básicas que asumimos sobre la cultura de los cuidados en nuestro país.
¿De qué manera pueden copiar otros el modelo de Camden?
Contratas a las personas más amables y cariñosas que hayas conocido, las capacitas sobre la salud del comportamiento y la adicción, y traes a gerentes realmente buenos capaces de cuidarse ellos mismos e implementar un proceso de supervisión reflexivo. Obtienes datos para que puedas evaluar lo que todos están haciendo a diario. Luego estableces una infraestructura para identificar a los pacientes correctos, llegar a ellos y aparecerte junto a su cama el mismo día que ingresen al hospital.
¿De qué forma los cambios potenciales a la Ley del Cuidado a Bajo Precio podrían afectar su trabajo?
Las personas con las que trabajamos son tan pobres y marginadas, es improbable que pierdan su cobertura de Medicaid. Mejores cuidados a un precio más bajo para pacientes con situaciones complejas es un problema bipartidario, así que la parte central de nuestro trabajo continuará.
La entrevista se editó y condensó por razones de claridad y brevedad.